La buena integración de los componentes de un equipo no debe darse únicamente en las áreas deportivas. La actitud que logre desarrollarse como equipo depende, además del invaluable trabajo físico, del desarrollo de un ambiente social íntegro que potencie los valores grupales. Tanto casi como de la dosis de proteínas diarias indispensables.
Reflexionó el compañero Rubito, quien hizo uso del micrófono en varias ocasiones: "La mayoría de nosotros pudimos haber elegido una fiesta con todo ya hecho y hubiese alcanzado con sólo ir a bailar, pero preferimos meterle haciendo mandados, inflando globos verdes, poniendo una casa, prendiendo el fuego, lavando platos, trayendo sillas, conectando cables, barriendo, llenarnos de humo... Hasta tener que destapar botellas una tras otra!!!"
No sólo el Sr. Beledo utilizó el micrófono, Gucci nos brindó sus apreciaciones emotivas al conmemorar 15 años de su renacimiento y divas (y divos) de la canción destruyeron el histórico silencio del Barrio Reus que se inundó de globos voladores color lechuga que inundaron de alegría a la zona toda. A la retirada algunos globos fueron vistos rebotando en la brisa de la mañana a algunas cuadras de distancia.
En definitiva, una noche inolvidable, de esas que no hacen sino compactar los grupos humanos y prepararlos para enfrentar grandes desafíos que exigen del trabajo unido y del apoyo incondicional de cada compañero, tanto como del aliento mutuo en cada nueva llegada.
Como reflexión final: Este trabajo diferente y profundo es el que crea grupos humanos que pueden hacer real lo inconcebible, sin importar condiciones, edades ni género.
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